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Frutillas: categorías y variedades

Existe una gran variedad de frutillas clasificadas en tres categorías. Entra y descubre todo lo que debes saber de este fruto silvestre.

Mié, 02/10/2024

Fresita del bosque, frutillas cultivadas y fresones, las categorías que encierran las variaciones de este fruto.

Son tantos los tipos de frutilla existentes que, para mayor facilidad en su identificación, se categorizan en tres: frutilla de bosque, frutillas cultivadas y fresones, campos que, cada uno, encierran a decenas de variaciones, todas comestibles; unas pequeñas y de sabor más intenso; otras medianas, pero comunes en el mercado, y otras de gran tamaño a un precio asequible.

Por un lado, las frutillas del bosque son reconocidas por su pequeño tamaño, delicioso aroma, intenso sabor y, como su nombre lo indica, por su origen silvestre, pues las puedes encontrar fácilmente en zonas boscosas. A su vez, las frutillas cultivadas son cosechadas sistemáticamente de septiembre a marzo en zonas cálidas y libres de heladas. Para terminar, el fresón es un tipo de frutilla que también proviene de la cosecha, pero de diferente especie de planta fragaria.

VARIANTES: LOS TIPOS DE FRUTILLA DE CADA CATEGORÍA

Aunque tres sean las categorías de tipos de frutilla, cada una de ellas contiene una importante cantidad de variaciones de este exquisito fruto. Acá te dejamos las especies más populares de frutilla del bosque, frutillas cultivadas y fresones:

1. Frutilla del bosque

Fregaria vesca (alpina): la fregaria vesca, o también conocida como alpina, es un espécimen de frutilla pequeña, muy dulce y reconocida por su intenso sabor y aroma.
Fragaria viridis: esta, particularmente, es una de las variaciones más ácidas y menos dulces, se le conoce como frutilla verde y es usual en las zonas boscosas de Europa y Asia central.
Fragaria Nubicola: se encuentran en las zonas tropicales y templadas del continente asiático y destacan, entre otras características culinarias, por su alto dulzor.

2. Frutillas cultivadas

Albion: una de las variedades más modernas y populares que existen; por su gran sabor, alta resistencia a condiciones meteorológicas adversas, punto de dulce perfecto y fácil recolección.
Elsanta: europea, muy jugosa, de gran duración tras su cosecha y se suele utilizar en postres de la zona por su magnífico equilibrio entre dulzor y acidez.
Camarosa: aunque tenga gran popularidad en zonas de clima cálida, es de fácil adaptación climatológica, lo que la hace una de las variaciones con mayor índice de cultivo en el último tiempo (60%).

3. Fresones

Chandler: como el personaje de la serie ‘Friends’, esta especie de frutilla es una de las más populares en Estados Unidos; de gran tamaño, jugosa y dulces como pocas.
Pájaro: de color rojo brillante, contiene una pulpa consistente y una forma cónica, este ejemplar de fresón es uno de los más apetecidos en los mercados de todo el mundo.
Seascape: altísima calidad, de color rojo oscuro, rico sabor, pero poca firmeza. Sin embargo, se adapta fácilmente para comercializarse en el mercado fresco y en el procesado.

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TODO TIPO DE FRUTILLA: LAS RECETAS DULCES MÁS DELICIOSAS

Como ya viste, existen varios tipos de frutilla alrededor de todo el mundo. Sin embargo, cada uno de los exponentes, grandes o pequeños, dulces o ácidos, jugosos o secos, cumplen a cabalidad a la hora de ser utilizados en la cocina. A continuación, estos son las cuatro mejores y más exquisitas preparaciones con frutillas:

Cheesecake de frutilla:
Una crujiente cama de galletas trituradas y mantequilla, sobre dicha base una mezcla de frutillas trituradas, un par de generosas cucharadas de crema de leche, queso crema, azúcar y gelatina sin sabor, y varias horas de refrigeración, darán como resultado un exquisito cheesecake potenciado con el dulzor natural de las frutillas.
Helado de frutilla:
Bate un tazón de nata hasta que se ponga espesa y añade una buena cantidad de La Lechera® Nestlé a la mezcla; acto seguido vierte tus frutillas trituradas con un poco de azúcar y revuelve bien por varios minutos. Almacena tu mezcla en un molde adecuado, refrigéralo en tu congelador y remueve cada 30 minutos hasta que quede cremoso. ¡Felicidades! Creaste un refrescante helado con el gusto suave y natural de las frutillas.
Mousse de frutillas:
Forma un puré de frutillas azucaradas, monta un recipiente lleno de nata y mezcla con las frutillas machacadas. Posteriormente, vierte gelatina caliente previamente hervida, bate, ponlo en moldes adecuados y refrigera. Una vez esté listo el mousse, taja algunas frutillas para ponerlas encima del postre y luego baña la superficie con chocolate de repostería derretido para darle un toque final ideal.
Batido de frutilla:
Pon en tu licuadora unas frutillas tajadas, leche, yogurt natural, miel y un poco de crema de leche, licua, detén el proceso, añade hielo y vuelve a licuar hasta que quede una mezcla lo suficientemente espesa como para tomártela sin problema.

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Delicioso helado hecho con varios tipos de frutilla.

Dónde cosechar varios tipos de frutilla

Es fácil encontrar cultivos de frutilla en muchos lugares, pues, por su gran variedad, siempre vas a encontrar una especie resistente a las condiciones atmosféricas de la región. Por ello, en México, hay varias regiones destacadas por la producción de frutillas. Acá te las reseñamos:

Irapuato, México: conocida como la "capital mundial de la frutilla," Irapuato, en el estado de Guanajuato, en México, tiene un clima templado y suelo fértil, ideales para la producción de frutillas de alta calidad.
Cajamarca, Perú: la región de Cajamarca, en el norte de Perú, es famosa por su agricultura, incluyendo la producción de frutillas. Su altitud y clima moderado favorecen el cultivo de esta fruta.
Antioquia, Colombia: en el municipio de Santa Elena, Antioquia, las frutillas se cultivan en altitudes elevadas, lo que garantiza un producto dulce y de excelente calidad.
Coclé, Panamá: en la región montañosa de Coclé, especialmente en El Valle de Antón, el clima fresco y los suelos volcánicos son perfectos para la producción de frutillas.
Valle Central, Costa Rica: en lugares como Cartago y Heredia, el clima fresco y la abundancia de agua hacen que el Valle Central de Costa Rica sea un lugar ideal para la producción de frutillas de excelente sabor y calidad.

Tres ensaladas agridulces con distintos tipos de frutilla

Perfecta en postres, pero exquisita como topping en ensaladas agridulces; usa los distintos tipos de frutilla para complementar tus platos fuertes más ricos y exprime todas las cualidades, sabores y usos de este fruto. Estas son las mejores tres ensaladas agridulces con frutilla:

Ensalada de frutillas y pollo:
Con una mezcla de lechuga tradicional, rúcula y lechuga romana; pechuga de pollo cocinada a la parrilla en rodajas, queso de cabra rallado, rodajas de aguacate, almendras y, por su puesto, una buena cantidad de frutillas, esta deliciosa ensaladilla puede pasar hasta por plato fuerte por su combinación de proteína, vegetales y frutos. Además, añádele un aderezo de jugo de limón, miel y pimienta para mejorar tu experiencia.
Ensalada de frutillas y espinacas:
Tal vez no tan completa como la ensalada de frutillas y pollo, pero podría complementar perfectamente cualquiera de tus platillos con su combinación de queso feta, cebolla morada, nueces caramelizadas, espinacas y frutillas frescas en rodajas.
Ensalada de frutillas y quinua:
La innovadora combinación de quinua cocida, frutillas, queso feta, pepino, pistachos y una hoja de menta, para añadirle frescura, puede ser una gran opción para ti los tuyos a la hora del almuerzo.

Fuentes:

Preguntas frecuentes

El clima juega un papel crucial en el crecimiento y la calidad de las frutillas, ya que estas prefieren climas templados con temperaturas moderadas. Las heladas pueden dañar las flores y los frutos, mientras que el calor extremo puede afectar negativamente el sabor y la textura de las frutillas.

Las frutillas son susceptibles a diversas plagas y enfermedades, como los ácaros, los pulgones, la podredumbre de la raíz y el moho gris. Para prevenir estas plagas y enfermedades, es importante practicar una buena higiene de la zona de cosecha, como eliminar las hojas caídas y los restos de plantas.

Es importante seleccionar un lugar de siembra que sea soleado y con buen drenaje para el uso de abono orgánico y la posterior siembra. Además, se debe regar regularmente el huerto, quitar la maleza y utilizar fertilizantes apropiados.