Es posiblemente el ingrediente más utilizado en la cocina para la preparación de todo tipo de recetas desde platos fuertes hasta postres y bebidas. Gracias a su versatilidad podemos transformar, realzar y potenciar el sabor de otros alimentos.
Hoy LA LECHERA® te comparte las mejores maneras de aprovechar el limón en tus recetas.
Zumo o jugo: Es muy usado en la preparación de bebidas frías, como una refrescante limonada; y de bebidas calientes, como es el caso del té negro u otras aguas aromáticas.
A la hora de aliñar pollo o mariscos, en especial el pescado, el limón enriquece sus sabores con un toque cítrico y es un aderezo infaltable que hace mucho más apetitosas nuestras ensaladas.
Eso no es todo, también en la repostería es utilizado para corregir los sabores cuando estos son muy dulces o empalagosos.
Cáscara: Las esencias presentes en su corteza se utilizan en la elaboración de aromas para repostería y pastelería, incluso para la perfumería; la ralladura, muy aromática, ensalza las fragancias del limón en los postres.
Es un elemento igual de útil en el hogar, ya que los restos de cáscara son excelentes para desodorizar los basureros o la refrigeradora.
Pulpa: Puede servir para preparar dulces o mermeladas y para extraer el jugo concentrado de limón el cual, por su alto contenido de vitamina C, es usado en la elaboración de medicinas.
Hojas: En ocasiones, ayudan a realzar el sabor de algunos guisos, carnes o se usan en la preparación de ciertos postres. Se pueden preparar infusiones con las hojas del limón, las cuales tienen muchas propiedades para la salud, entre ellas favorecer la digestión después de las comidas.
Tips para aprovechar el limón
- Para un arroz más blanco agrega un chorro de zumo al momento de cocinarlo, su color será más llamativo.
- Evita el oscurecimiento de tus manzanas o papas cortadas, sumérgelas en agua con un chorro de limón o frótalas con la mitad de uno.
- Quita malos olores de tu basurero poniendo algunas cáscaras de limón al fondo, debajo de la bolsa.
- Crea unos atractivos cubos de hielo agregando un pedacito de cáscara en cada uno antes de congelarlos.